Como sabemos, desde el pasado 1 de septiembre se ha incrementado el Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Aunque la medida fue publicada el día 29 de septiembre, se aplica desde el primero de mes. En concreto, el SMI ha quedado fijado en 965 euros al mes o 32,17 euros al día. Esto supone un incremento de 15 euros mensuales respecto al anterior mínimo. Aunque la intención del Gobierno es que llegue a los 1.050 euros al mes antes del final de la legislatura.
Salario Mínimo y retribuciones en especie
Como sabemos, la retribución flexible entra dentro de las llamadas retribuciones en especie. Con la particularidad de que además, tiene una ventaja fiscal. La mayoría sabe que existen varios productos dentro de la retribución flexible que tienen límite de exención fiscal. Por ejemplo, los 11 euros al día de restaurante o los 500 euros por asegurado y año del seguro de salud. Mientras que otros productos como la guardería o la formación no tienen límite de exención.
Sin embargo, si existen dos limitaciones muy importante que se deben tener en cuenta cuando hablamos de cualquier salario en especie:
- Que la suma de todo el salario en especie de la persona en ningún caso debe superar el 30% de su retribución total anual.
- Además la renta dineraria del empleado (la parte que cobra en dinero, que no es retribución es especie) nunca debe ser inferior al SMI. O en el caso de que fuera un trabajador a tiempo parcial, su proporción.
En otras palabras, la personas que trabajan a jornada completa deben cobrar al menos 965 euros al mes en dinero.
Casos reales donde debemos cuidar estas limitaciones
Los datos revelan que la gran mayoría de los que solicitan retribución flexible suelen tener sueldos anuales bastante por encima de SMI. Lo cual permite a muchos «olvidarse» de tener en cuenta este límite legal. Sin embargo, hay casos en los que si hay que tenerlos un poco más en cuenta.
- Caso 1: Formaciones de alto nivel, como un master. Uno de los casos en los que una persona puede acercarse con más probabilidad al límite del 30% de su retribución total anual o al SMI es cuando realiza formaciones con costes muy altos. En estos casos, es importante que desde el departamento de recursos humanos se conozcan esta normativa para evitar errores. Para los clientes de Flexoh, no existe peligro de sobre pasar ningún límite legal, ya que la propia plataforma esta configurada para que el empleado no supere los importes permitidos. Aunque por ejemplo, en el caso de la formación, el empleado puede solucionarlo en muchos casos dividiendo el pago en varias nóminas, desde la propia web o App de Flexoh.
- Caso 2: La guardería. Puede ser que justamente la persona que gana menos dentro de la pareja, sea justo la que tenga la empresa que ofrece la posibilidad de elegir cobrar parte de su sueldo cómo retribución flexible. Lo cual puede provocar que para la economía familiar siga siendo beneficioso tener la guardería como retribución flexible, aunque uno de los padres tenga un salario por debajo del SMI. Sin embargo, la normativa es clara y ni en estos casos el empleado puede superar estas limitaciones legales. Desde la plataforma de Flexoh somos conscientes de estas casuísticas y facilitamos que la persona pueda disfrutar el máximo importe posible como retribución flexible. Por lo tanto aunque la guardería tenga un coste de 400 euros y la persona solo pueda seleccionar 300 euros como retribución flexible, se facilita esta opción. Para que todos puedan disfrutar del máximo ahorro fiscal posible.
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